13 marzo 2011

¿Pared o ventana?

No había querido hablar del Curso de Pizarra Digital que estoy impartiendo hasta haberlo acabado, pero este fin de semana, de la mano de Jaime Olmos (@olmillos para los amigos tuiteros) y de varios colegas más, se ha difundido la presentación que preparé para la primera sesión del curso. Como en Internet todo caduca tan pronto, avanzaré en esta nota algunas de las conclusiones parciales sobre el uso de las pizarras digitales a las que voy llegando en estos días. Intentaré ser esquemático, aunque sabéis lo mucho que me cuesta.

TIENE SENTIDO:
  • Disponer de pizarras digitales (interactivas o no) en todas las aulas.
  • Formar al profesorado para su uso.
  • Recopilar recursos y etiquetarlos en marcadores sociales para que sirvan a otros.
  • Utilizar materiales que ofrecen las editoriales o las instituciones como apoyo a la docencia.
  • Aprovechar la red para compartir desde y hacia el aula.
NO TIENE SENTIDO:
  • Una pizarra digital (o dos) para todo el instituto/escuela.
  • Tener que pedir hora para usarla o tener que dedicar veinte minutos a montar y desmontar.
  • Crear o generar contenidos propios para cada clase.
  • Usarla exclusivamente como superficie en la que escribir.
  • Usarla exclusivamente para 'ver' Internet.

Resumiendo:
a) Los docentes no han tenido que escribir nunca los libros de texto ni las enciclopedias, por tanto me resulta absurdo que ahora tengamos que dedicar buena parte de nuestro tiempo a crear ejercicios interactivos o recursos multimedia; a eso se dedican las editoriales. Si además, ese producto se enlata en un CD o en una memoria USB, será un esfuerzo baldío que sólo aprovecha a un docente.
b) En este oficio, y con el desbordamiento de recursos e información disponible en la red, se está haciendo imposible trabajar con los hábitos individuales y acumulativos de los eruditos decimonónicos. Etiquetar y compartir recursos es nuestra tabla de salvación. No tiene ningún sentido volver a hacer algo que ya está hecho (a no ser para mejorarlo, claro).
c) Las actividades interactivas pueden tener, gracias a la Pizarra Digital Interactiva, una nueva vida, pues permiten socializar aprendizajes individuales; sin embargo, siguen siendo actividades mecanicistas.
d) Una pizarra digital 'al lado' de una tradicional implica que la primera no es más que un plan B de la segunda, un accesorio del que podemos prescindir. Hagan la prueba: Vayan al salón, coloquen en el lugar de la tele el microondas y desplacen la tele hacia el rincón y ahora digan "ahí sí que se ve bien".
e) Por último, no olvidemos que nuestras programaciones se hacen a partir de los 'objetivos' del currículo y que la enseñanza (incluida la 2.0) no debería basarse tanto en contenidos como en procesos para conseguir esos objetivos. Las estrategias para que esos procesos se consigan no forman parte del software de la pizarra, sino de la competencia del docente.

17 comentarios:

Unknown dijo...

Ventana por supuesto. Demasiado tiempo han durado las aulas cerradas a cal y canto.
Puesta a elegir quiero una pizarra "balcón".
Gracias por la entrada

Marcos Cadenato dijo...

Pues totalmente de acuerdo, amigo mío: ventanas no paredes y abiertas al mundo, sí señor... Las PDI o las pizarras son sólo medios, no objetivos y tienen que ser lo más transparentes que se pueda... Contenidos, procesos y colaboración, es lo importate, efectivamente.

Patxo Landa dijo...

Una ventana lo es realmente cuando se abre, lo demás es un escaparate, un cuadro colgado. Las ventanas abiertas renuevan el aire, dejan ver y ser vistos, oír y ser oídos y posibilitan la conversación con los que pasan.
Las PDI van a ser una buena excusa para insistir en las bondades de la web 2.0 y sus posibilidades estratégicas.
Sobre lo que comentas del punto C, los hot potatoes, por ejemplo, no tenían sentido antes. Ahora, en cambio, si el profesor dirige la reflexión mientras el alumno los resuelve delante de la clase, empiezan a tener cierto interés pues se supera lo mecánico.
La presentación me impactó cuando la vi por primera vez. Buenísimo trabajo, Toni. Me sigue encantando.

María Miguélez dijo...

Me ha encantado tu presentación, por supuesto los cambios en la tecnología no sirven de nada si no hay por detrás el trabajo de profesionales decididos a que las cosas cambien. La pizarra digital como un modo de dejar entrar el mundo entero en el aula... ¿Estaremos los docentes a la altura de todos estos desarrollos tecnológicos? ¿Sabremos optimizar sus posibilidades para para el aprendizaje efectivo de los alumnos?
Gracias por tu reflexión

eduideas dijo...

Me gusta mucho la metáfora de la ventana. Efectivamente no tiene sentido tener una pizarra si no se usa para acceder a la red y compartir, pero ello significa previamente haber cambiado la manera de dar clase; para proyectar presentaciones animadas no vale la pena el gasto, tenemos los powers de siempre o el "maravilloso" libro digital. La pizarra tiene sentido si se usa para hacer cosas que antes no se podían hacer, como cualquier otra herramienta.

Unknown dijo...

Totalmente de acuerdo. Una vez más se demuestra que queda mucho camino por recorrer. Siempre digo que hay que empezar por "el trabajo en equipo" y no cada uno hacer la guerra por su cuenta.
Por cierto, magnífica entrada.

mjchorda dijo...

Me hubiera gustado asistir a ese interesante curso, de hecho este comentario lo hago desde el punto de vista del profe que está aprendiendo. Creo, por lo que veo a mi alrededor, que se cumple en mayor medida todo lo que según leo en tu entrada no tienen sentido. Dos o tres pizarras por centro, profes que las controlan y las usan para ver internet, powers etc y otros que estamos en ello y agradecemos tus buenas instrucciones. Pero creo que la realidad es que aún muchos de nosotros,estamos en ello aunque pocos salgamos en tu blog. De todos modos es cierto todo lo que dices, aunque los learning andemos trasteando con ellas.

Valeria dijo...

Me encantó tu presentación. La he compartido con mis colegas en http://pdi.moodlehub.com
Te invito a visitar mi plataforma y aprovechar todo lo que allí hay.
Saludos!!

Carmen Iglesias dijo...

Llevo leyendo tus post desde hace dos años, cuando empecé con la aventura de difundir las TIC, sigo diciendo que se puede decir más alto pero no más claro. Tú si que eres un buen propósito para la educación #purposedES

Marimar dijo...

La metáfora de la ventana es preciosa. Esa ventana tiene que acercar el mundo a las aulas y meterlo dentro de la escuela.
De todas formas, la PDI no me parece especialmente interesante para las clases de Lenguas. Si pensamos en ella para crear materiales, su software sirve fundamentalmente para realizar actividades mecánicas y descontextualizadas. Si pensamos en un medio que favorece el uso de las herramientas TIc, sería mucho más barato un proyector y un ordenador.
De todas formas, no estoy de acuerdo en que el profesorado no debe crear materiales. Es nuestra responsabilidad y nuestro derecho y no debemos dejar este aspecto tan importante de nuestra profesión en manos de editoriales o de empresas.

Eduardo Larequi García dijo...

Unas ideas muy sensatas y muy atinadas, Toni. Pienso utilizar esta entrada tuya como frontispicio de una propuesta didáctica para un minicurso que voy a impartir a los alumnos del Máster de Secundaria, dentro de diez o doce días.

Lourdes Domenech dijo...

Toni, la pdi sí es una ventana, pero hay quien mira desde detrás del cristal y no se atreve a más. Mirar por la ventana sin abrir y descubrir lo que hay más allá no es avanzar. Porque las PDI son un avance, ¿no? ¿O no lo eran? Vaya lío.

(En eso estoy, intentando desentrañar los beneficios o los malos vicios de usar la pdi. Te sigo, maestro.)

Joselu dijo...

Has señalado algunas aplicaciones que yo utilizo como carentes de sentido. Me explico. Yo utilizo la pizarra digital como soporte del blog de la clase en el que hay enlaces a diferentes aplicaciones educativas como diccionarios, conjugadores verbales. ortografía, pero no utilizo el libro digital de la editorial correspondiente.

La suelo usar para pasar cortos sobre los que han de responder a una serie de cuestiones que les planteo y que generan un debate.

La empleo como soporte para escribir o para ilustrar a través de internet palabras que mis alumnos desconocen.

No guardo mis cuadros ni los clasifico en marcadores sociales. La verdad es que no sé a quién le podrían interesar, si es que tienen algún valor. Pienso que el proceso de enseñanza no es colaborativo en la práctica. No ponemos en común en los seminarios las experiencia que realizamos. No veo que las mías interesen a nadie (otra cosa es el blog y las redes tejidas en torno a la blogosfera) aunque yo no oculto lo que hago y hago partícipe a todo el que quiera conocerlo. No hay criterios compartidos. El uso de las pizarras digitales no genera intercambio de experiencias fuera de aquí.

Pienso que la pizarra digital es una ventana abierta al mundo, pero no veo sus aplicaciones en el sentido que sugieres o planteas. No sé nada de marcadores sociales que puedan llevar a compartir los contenidos, ni utilizo los recursos de las editoriales. Estoy haciendo mi propia elaboración del sistema y contenidos aunque no sé con qué eficacia. No baso la clase en la memorización sino en las competencias comprensivas y expresivas potenciando el debate, la redacción, la reflexión sobre temas complejos...

Toni Solano dijo...

Estrella: Te apunto en la lista; yo también prefiero el balcón, que entra más luz :-)
Marcos: La invisibilidad de las TIC... seguimos tropezando con tecnologías y equipamientos poco fiables y eso no ayuda al cambio.
Patxo: Los interactivos enganchan mucho y permiten trabajar en la pizarra con cierto interés, pero hay que tener en cuenta que acaban aburriendo. Es un recurso para usar de vez en cuando, no para que se convierta en base metodológica.
María: Los docentes estaremos a la altura de lo que nos propongamos. Para explotar la PDI hay que usarla; es como decir que no sabes poner la lavadora sin acercarte a ella.
Eduideas: Estoy viendo muchos recursos digitales de editoriales y casi todos se reducen a eso, pdf enriquecido, powerpoints convertidos a flash, interactivos que repiten el esquema del ejercicio impreso y poco más. Los libros digitales seguirán siendo libros, no maestros.
Fernando: El oficio docente propicia que cada cual cierre su puerta y se aisle en clase. Los claustros se parecen más a los de un monasterio que a los de un equipo educativo. Si no somos capaces de derribar los límites del centro y de las asignaturas no llegaremos a ningún sitio; fíjate que en la red se borran las disciplinas porque no importa tanto compartir contenidos como compartir métodos.
Mª José: También yo estoy en el apartado de sinsentidos; en mi centro hay sólo dos PDI para 500 alumnos y una de ellas está en el aula CIL para un grupo reducido de seis alumnos con problemas severos. La otra está en el aula de informática, así que hay que buscar huecos. Eso sí, este año por fin podemos contar con otras dos aulas de ordenadores para los 60 profesores. No he hecho cálculos, pero supongo que saldríamos a una disponibilidad de diez minutos de pizarra por profesor y semana.
Valeria: Gracias. Además un glogster como menú de inicio :-)
Carmen Iglesias: Gracias por los cumplidos. Seguro que José Luis Gamboa se pasó con los elogios cuando estuvo por allí; no se lo tengáis en cuenta :-)
Marimar: El software Notebook es una especie de Powerpoint ampliado y enriquecido con flash, así que no supone gran avance. Es cierto que la ventaja con respecto al cañón es la posibilidad de trabajar directamente sobre la superficie en lugar de hacerlo sobre el ratón. En cuanto a la creación de contenidos, me refería a dedicar esfuerzos (horas) a materiales que ya están funcionando. Está claro que los libros de texto también los hacen profesores, y que estamos en nuestro derecho de crear materiales propios, pero cargar a quienes empiezan con la doble responsabilidad de manejar la tecnología y crear materiales me parece excesivo. Yo apuesto por un sistema en el que editoriales e instituciones premien (económica o académicamente) a quienes creen los materiales, lo que permite al resto dedicarse a trabajar con otros aspectos, como por ejemplo la metodología, la colaboración, etc.
Eduardo: Quedo a tu disposición; seguro que convences a muchos.
Lu: A muchos les da miedo abrir la ventana, no se sabe bien si por miedo a que entre algo de fuera o por miedo a que se le escapen quienes están dentro. Pero ya vemos que es difícil poner puertas y ventanas al campo del conocimiento. Seguro que en poco tiempo sabrás más que yo de estos artilugios :-)
Joselu: Tu blog ya es un marcador social porque en él compartes. Me refería básicamente a etiquetar recursos que utilizas en clase para que otros puedan llegar a ellos. En cuanto a la metodología, por ejemplo, utilizo google docs sobre la pizarra digital (interactiva o no) con lo que podemos reflexionar sobre la escritura de los alumnos en tiempo real. Se trata de decir qué hacemos cada uno para que no repitamos errores, para que abramos camino.

Anónimo dijo...

Antonio, vi tu presentación en el blog Lengüetrazos y me encantó por la claridad y contundencia de lo que expones.
Fíjate, en mi centro hay una sola PDI que se utiliza casi exclusivamente como pared-proyector, ya que el profesorado no sabe utilizarla y, pese a la insistencia en recibir un pequeño curso de formación al respecto, todavía no hemos tenido la oportunidad (¿privilegio?) de recibirlo.
Ya es hora de ir abriendo ventanas.

Gemma dijo...

Preciosa presentación, Antonio...
Joer, y encima ahora tengo que pensar... ¿Y la hermosura gratuita? :)

Manuel López dijo...

Amén, Toni. Nada que añadir.
Un saludo.