12 diciembre 2022

Buscando respuestas en el infierno

Demonios, una novela de medias verdades.

No es fácil reseñar la novela demonios de Javier Vicente Moreno sin desvelar algún elemento esencial de su trama. No se trata de una novela de intriga ni tampoco un drama amoroso que pueda desmontarse si salen a la luz los detalles que el lector desconoce. Pero en el fondo sí que se trata de un drama amoroso con intriga, aunque también podría decirse que es una comedia negra con tintes fantásticos. En mi opinión, esa es la gran virtud de esta obra de Javier Vicente: conseguir que la tragedia se disfrace de comedia a través de un hábil narrador que maneja los hilos de una trama llena de recodos y habitaciones sin visitar. El juego de puntos de vista articula esas zonas de luz y sombra con maestría, dejando al lector a merced de un narrador demiurgo, que administra con rigor y crueldad los datos precisos para descubrir la gran pregunta, esa pregunta que lleva al protagonista a su particular descenso a los infiernos. Se puede apreciar que me gusta el narrador, creo que es el gran logro de la novela, más allá incluso de sus personajes poliédricos y esquivos. He intentado buscarle antecedentes a ese tono erudito, soberbio y socarrón que se gasta en bastantes ocasiones, un estilo que recuerda un poco a Eduardo Mendoza y otro poco a John Kennedy Toole: esa mezcla de lo ácido, lo cómico y lo sórdido están ahí presentes. Por supuesto, hay mucha literatura clásica detrás, referentes que no es necesario desgranar, desde la mitología o la epopeya, hasta la novela decimonónica. Sin embargo, esta intertextualidad se encuentra diluida en una prosa ágil y esmerada, una prosa que busca continuamente la complicidad del lector, de ese lector que es capaz de disfrutar por igual de la sobriedad de Baroja que de la riqueza de Luis Martín-Santos. Así pues, demonios es una novela que merece la pena leer, una primera novela de un autor que tiene mucho que contar y que sabe hacerlo bien. Es una novela sin moralejas pero con mensaje: la verdad es demasiado compleja como para ser única, y mucho más si la confiamos a la memoria. En cuanto a los demonios, conviene que cada uno tengamos a mano la pregunta adecuada por si, de repente, llega el momento de pedirles explicaciones, porque el cielo puede esperar, pero el infierno, no.

Página web de la editorial Saralejandria: demonios

10 diciembre 2022

Vuelve #poema27... y son ya 15 ediciones


Por diciembre vuelve el acontecimiento poético por excelencia: #poema27, y este año se cumplirán 15 desde que inicié en este blog, con ayuda de muy buenos colegas esta llamada poética. Para los más despistados, hay que recordar que esta cita anual celebra el acto fundacional de la Generación del 27, cuando en los próximos días 16 y 17 de diciembre se cumplan los 95 años del encuentro de algunos autores de ese movimiento literario en el Ateneo de Sevilla. Este aniversario poético lo celebramos llenando la red de poemas y versos de aquellos poetas. Cada año, docentes, alumnado y aficionados a la poesía en general, se suman a esta invitación y comparten en redes sus poemas o versos preferidos.

Así pues, a lo largo de esta semana podéis publicar cualquier homenaje poético en los blogs, en Facebook, en Instagram y, por supuesto, en Twitter, bajo la etiqueta #poema27. La nómina de autores es bastante extensa y podéis encontrar suficientes poemas de ellos en la red, sin olvidar a las mujeres de la Generación, esas olvidadas que tímidamente asoman en los últimos años bajo la etiqueta de Las sinsombrero, como si necesitaran unirse para ser escuchadas tantos años después. Es también una oportunidad para llenar las aulas de poesía y para jugar en familia con la narrativa digital. Os dejo unos ejemplos y variados enlaces al final por si queréis investigar. Para el aula se pueden repartir poemas (por ejemplo, esta antología del 27), para ser grabados en podcast o vídeo de manera voluntaria. ¿Os animáis?


Mis homenajes:
Año 2017: Al final de la tarde (Ernestina Champourcín)
Año 2016: Underwood girls (Pedro Salinas)
Año 2015: La tarde... Josefina de la Torre
Año 2014: Dos poemas y más
Año 2013: Canción que nunca pone el pie en el suelo (Rosales)
Año 2012: Al oído de una muchacha (Lorca)
Año 2011: Amor oscuro (Altolaguirre)
Año 2010: Cernuda y Morente
Año 2009: Cernuda

Sesquidécada: diciembre 2007


La literatura de terror no es mi género preferido, aunque sí que he disfrutado muchísimo con autores como H.P. Lovecraft, Richard Matheson, Robert Bloch o los clásicos como Poe o Maupassant. En diciembre de 2007 me acerqué a un autor relativamente actual que me habían recomendado: Clive Barker, cuyos Libros de sangre protagonizan esta breve sesquidécada. Se trata de un conjunto de relatos de terror variados y originales, que combinan el horror con el suspense, en unas tramas ágiles e inquietantes. Estan recogidos en diversos volúmenes, pero os recomiendo que os acerquéis al primero y echéis un vistazo primero, no sea que el miedo se apodere de vosotros y no tengáis ánimo de seguir con el resto (aquí podéis leer uno de ellos). En serio, vale la pena su lectura y creo que incluso algunos de ellos se han convertido en película o serie. 

Tengo asimismo anotadas en mi registro un par de comedias de Plauto, supongo que para contrarrestar el pánico: también para eso sirven los clásicos.