18 marzo 2014

Taller literario del exilio


El paseo subterráneo por las lecturas del exilio entra en su tramo final antes de que el metro-barco salga a flote para surcar nuevas aguas. En las últimas semanas hemos recopilado numerosos textos literarios de todo tipo y hemos hecho memoria de algunos de los pasajes más vergonzosos de la historia propia y ajena. Muchos de vosotros habéis contribuido aportando lecturas y otros habéis difundido el proyecto en las redes. Personalmente, esta labor me parece más que necesaria en los tiempos que corren, sobre todo a la hora de educar a nuestros jóvenes en el respeto y la humildad, pues detrás de todos los exilios hay una sociedad que se cree por encima de las demás. El exilio es soberbia y crueldad a partes iguales.


En este último tramo os propongo un reto en forma de actividad de aula. Se trata de preparar un taller literario del exilio, es decir un proyecto, una tarea, una secuencia didáctica o una simple sesión en la que se realice un trabajo creativo sobre el exilio, a ser posible multimedia (podcast, vídeo, herramienta digital...). Sé bien que son fechas difíciles para muchos y que las programaciones de aula permiten a esta altura del curso poco margen de maniobra, pero el reto quedará abierto para que podáis aportar vuestras ideas cuando os parezca bien, este año o los venideros, pues lamentablemente el tema no pasa de moda. Para ello he creado un grupo en Diigo -Leer el exilio- al cual os podéis suscribir y en el que podéis etiquetar vuestras actividades o cualquier otro recurso relacionado con la literatura y el exilio. También seguirá disponible el panel colaborativo de Pinterest, el hashtag #leerexilio de Twitter y las redes de Facebook, Proyéctate o Linkedin, en las cuales pueden compartirse esos recursos.

Espero que el viaje haya sido de vuestro agrado. Al menos, este efímero capitán lo ha intentado...

1 comentario:

Miguel dijo...

Me parece una iniciativa muy atractiva. Gente como tú hace que esto de la educación sea una actividad atractiva y viva.
Espero que estés pasando unas buenas fiestas de la Magdalena.

Un fuerte abrazo.