29 diciembre 2011

Sesquidécada: diciembre 1996

"Mi infancia son recuerdos de un patio de Sevilla...", dice Machado cuando traza su retrato poético. La mía también tiene resonancias de patio andaluz, aunque dejé muy pronto aquellas tierras meridionales para afincarme primero en Valencia y luego en Castellón. Uno de los recuerdos más tempranos ligados a la literatura con mayúsculas se corresponde, curiosamente, con un autor cuyos primeros textos leí hace quince años. Se trata del Inca Garcilaso de la Vega, hijo de una princesa inca y un conquistador extremeño. Era yo muy pequeño cuando paseaba por delante de la casa del Inca, situada en Montilla y me preguntaba quién sería aquel personaje con ese apelativo tan exótico. Y es que esta sesquidécada viene marcada por el exotismo de las crónicas del Nuevo Mundo, en las que destacan dos figuras: este mestizo americano que quiso sentirse orgulloso de ser español y otro español que se avergonzaba de serlo por las atrocidades cometidas por sus paisanos en América, el dominico Bartolomé de las Casas.
En diciembre de 1996 me adentré en la literatura de los orígenes latinoamericanos con estas figuras dispares. El Inca Garcilaso me sorprendió con sus Comentarios reales, una especie de crónica divulgativa de los usos y costumbres en el imperio inca. Su prosa resulta bastante accesible y cercana, sobre todo en la edición crítica de Cátedra que ofrece una selección de los textos más interesantes. Da la impresión, en ocasiones, de estar leyendo un reportaje del National Geographic, por el tono divulgativo que imprime a su obra. Destaca también el interés por dignificar al nativo americano frente a los colonizadores, aunque resulta evidente también la admiración que despierta la civilización europea a este gran prosista. Como dice Jean Franco: "El propósito fundamental del Inca era de carácter justificativo, quería demostrar que el imperio inca podía compararse con los de Roma y Grecia y que su religión no estaba muy lejos del monoteísmo, y que por lo tanto estaba madura para la fe cristiana". Aun así, las autoridades españolas prohibieron tiempo después (en 1782, después de la rebelión de Tupac Amaru) los Comentarios reales, porque se suponía que el libro suscitaba peligrosos sentimientos de orgullo respecto a un pasado precolonial. Como cada cual puede hacer su lectura con arreglo al tiempo que le ha tocado vivir, releyendo algunos apuntes, me quedo con esta cita referida al emperador y sus súbditos, aunque bien sabemos que no tiene nada que ver con nuestro reino:
En el labrar y cultivar las tierras también había orden y concierto; labraban primero las del sol, luego las de las viudas y los huérfanos, y de los impedidos por vejez o por enfermedad (...). Mandaba el Inca que las tierras de los vasallos fuesen preferidas a las suyas; porque decían que de la prosperidad de los súbditos redundaba el buen servicio para el rey, que estando pobres y necesitados mal podían servir en la guerra ni en la paz. 
La segunda obra que traemos a colación es la Brevísima relación de la destrucción de las Indias, un libro escrito por el dominico español Bartolomé de las Casas. Dice J.H. Elliot que la "Breve relación de la destrucción de las Indias de Las Casas, publicada por primera vez en España en 1552, y la aguda Historia del Nuevo Mundo (Venecia, 1565), de Girolamo Benzoni, contenían más munición de la que incluso hubiesen podido desear los enemigos más fanáticos de España. (...) Sólo hicieron falta las aterradoras ilustraciones de Teodoro de Bry en la nueva edición del libro de Las Casas a finales de siglo, para grabar en la conciencia europea una imagen indeleble de las atrocidades españolas".
En efecto, tras la lectura de esta obra, uno se avergüenza de ser español y de haber contribuido a la explotación y masacre indígena. Sin embargo, nada es blanco o negro, y tras esta obra se esconden intereses políticos y religiosos que desdibujan la veracidad del relato del dominico. Aun así, no podemos disculpar los abusos bajo la excusa de que hubo otros mayores. Es una obra breve que todos deberíamos leer en alguna ocasión para ponernos en la piel del otro, y también, lamentablemente, una obra con una vigencia aterradora.


Y cambiando diametralmente de tercio, para cerrar esta sesquidécada, os dejo un documento con algunas citas rescatadas de un ensayo que también leí en aquellos días y que me resultó muy interesante: La mujer insatisfecha: El adulterio en la novela realista, de Biruté Ciplijauskaité. Para los aficionados a la novela del XIX es una auténtica delicia. Espero que celebréis la entrada del nuevo año con renovadas ansias lectoras.
FELIZ 2012

Crédito de la imagen: Casa del Inca Garcilaso 

22 diciembre 2011

Callejeros Literarios: “el barrio de la alegría”



Hace ya unos cuantos años cantaba nuestro poeta urbano Joaquín Sabina, “vivo en el número siete, calle Melancolía./ Quiero mudarme hace años al barrio de la alegría,/ pero siempre que lo intento ha salido ya el tranvía/ y en la escalera me siento a silbar mi melodía.” Pues… nosotros lo hemos podido coger, -tenemos bien guardado el billete- y ahora, silbando también nuestra melodía, somos un poco más felices porque en Callejeros Literarios hemos encontrado “nuestro barrio de la alegría”.
Cuando el curso pasado nos lanzamos a las calles, avenidas, glorietas y alamedas de nuestros pueblos y ciudades a buscar huellas de nuestros góngoras, cervantes, albertis o unamunos ninguno de los organizadores de Callejeros Literarios pensábamos que pudiésemos conseguir tanta felicidad. Callejeros es un proyecto que nos parecía muy hermoso. Ahora sabemos muy bien por qué. Gracias a todos los profesores y alumnos que habéis participado con vuestros callejeros, vuestros mapas, vuestras placas, vuestros vídeos ahora somos un poquito más felices. Descubrir con vosotros que la Literatura está viva, que está en la calle, que hay vida más allá del libro de texto ha sido un maravilloso descubrimiento. Gracias a vosotros y a Callejeros –lo queremos repetir muy alto- hemos podido sacar la Literatura a la calle, hemos podido hablar de tú a tú con Espronceda, con Lope, con Gabriel Aresti y hemos callejeado de la mano de Rosalía de Castro, Mariana Pineda, Ausiàs March o Rubén Darío… La Historia de la Literatura deja paso a la formación literaria…
Durante algunos meses hemos recorrido los principales encuentros educativos y blogosféricos para explicar este proyecto colaborativo porque creemos firmemente que es un trabajo por proyectos –no solo una actividad TIC- y pretende modestamente una renovación de la didáctica de la Literatura mediante la educación literaria del corazón: del tú a tú, del calle a calle, del verso a verso… Se preguntaba hace poco nuestro compañero si “la calle Valle-Inclán está alumbrada con luces de bohemia” o si “la calle Góngora ha de ser tortuosa y oscura”. No podemos saber cómo es una ciudad por el nombre que da a sus calles, pero sí podemos ayudar a descubrir a nuestros jóvenes alumnos que bajo esas viejas placas –muchas veces oxidadas- se esconden grandes nombres de nuestra Literatura y, sobre todo, grandes y hermosos textos que nos confortan, que nos alegran, nos entristecen, que nos ayudan a vivir…
Ser callejero literario engancha”, escribió uno de nuestros colaboradores y no nos hemos cansado de repetirlo. Desde que alzamos nuestros ojos buscando un nombre, un título, un personaje no hemos dejado de sorprendernos, de maravillarnos, de alegrarnos. Queremos contagiaros nuestra alegría estos días de luces de colores, de belenes y villancicos e invitaros a que visitéis nuestro barrio de la alegría: está lleno de preciosos callejeros donde la voz de nuestros poetas, escritores y escritoras más célebres se fusiona con la voz de maestros, profesores, niños y jóvenes que pasean, alegres, por sus calles. También queremos invitaros a que durante este nuevo y próspero año 2012 –así sea- os acerquéis sin miedo a vuestros callejeros -visitad la web de vuestro ayuntamiento- y preguntéis, indaguéis y escuchéis cómo os hablan Pablo Neruda, Roberto Bolaño o María Zambrano y os invitan a participar en la edición de Callejeros Literarios 2012 para que nuestro pequeño barrio se convierta en un auténtico himno a la alegría.

Más información:






¡MUCHAS FELICIDADES Y UN PRÓSPERO 2012!
BON NADAL I FELIÇ ANY NOU!
ZORIONAK ETA URTE BERRI ON!
PARABÉNS E UN PRÓSPERO 2012!

16 diciembre 2011

Amor oscuro: poema del 27

Mi aportación al homenaje a la Generación del 27 es el recitado del poema 'Amor oscuro', de Manuel Altolaguirre, ilustrado con imágenes de FlickrCC






  • Para seguir la publicación de poemas en estos días, existe una etiqueta en diigo: poema27; y un hashtag en Twitter: #poema27
ADDENDA:
Durante el día de hoy, estamos grabando poemas en los grupos de 2º/3º de ESO. Podéis encontrarlos en su blog de aula

08 diciembre 2011

Que nos pille confesados

La próxima semana vamos a cerrar Nirewiki, desde hacía años no se podían dar de alta nuevos usuarios y creo que ha llegado el momento de dar de baja el servicio que apenas tenía ya actividad. Para que no perdáis todo el contenido que habéis generado en vuestro Wiki, hemos preparado un sistema para exportar todo el contenido y todos los archivos que hayáis subido...
El cierre de Nirewiki me pilla con dos sitios a los que tenía especial aprecio. El wiki de trabajos monográficos en el que mis alumnos colgaron sus trabajos durante dos cursos y el Homenaje a Ángel González, uno de los primeros proyectos colectivos multimedia. Ayer, cuando recibí el mensaje, me puse a rescatar las páginas del homenaje y estuve creando uno nuevo en Wikispaces; por cierto, no dejéis de escucharnos a algunos profes de la web 2.0, también presentes en otro homenaje que también habrá de mudarse, el de Mario Benedetti que preparó Joselu. A la sazón, descubrí que algunos de los archivos de audio también habían desaparecido (al menos los alojados en Odeo y boomp3). Nirewiki fue un gran hallazgo en su tiempo, pues ofrecía un servicio atractivo de wikis y de blogs (nireblog) en muchos idiomas, con una interfaz bastante sencilla. Una lástima, pero ya se sabe, como es gratis...
Hace una semana, JayCut avisaba de que cerraba su editor gratuito de vídeo on line, y advertía que se debían descargar los vídeos allí alojados para no perderlos. Esta vez no me atrapó con demasiadas cosas, pero podría haber sido peor. Como lo ocurrido con Slide.com, quizá uno de los sitios de imágenes más populares de los últimos tiempos. También Slide ha avisado y ha dejado tiempo suficiente para descargar las fotos o exportarlas a Picasa, pero reconozco que me costará bastante encontrar todos los sitios en los que tengo incrustadas presentaciones de Slide para cambiarlas por las de Picasa (si es que vale la pena tanto esfuerzo).
Miedo me da si la crisis empieza a tumbar sitios en los que confío casi a ciegas, como Scribd, Slideshare o Blogger. Que el error 404 nos pille confesados.

Crédito de la imagen: Picnic network 404

27 noviembre 2011

Sesquidécada: noviembre 1996


Numerosos colegas se hicieron eco el pasado 25 de noviembre del día contra la violencia de género. En esta sesquidécada aprovecharé para deslizar alguna referencia femenina dentro de mis lecturas de noviembre de 1996. 

La primera mención va para La venus mecánica de José Díaz Fernández, de quien hablaba no hace mucho mi amiga Conxa en su blog. Es una novela ligada a las vanguardias españolas, en la línea de los experimentalismos de Gómez de la Serna, Benjamín Jarnés, Mauricio Bacarisse, Juan José Domenchina, Jaime Torres Bodet o Ernesto Giménez Caballero -recomiendo la antología de Buckley y Crispin en Alianza editorial-. Esta venus mecánica representa el espíritu de la mujer moderna y revolucionaria, una heroína que rompe con el papel tradicionalmente reservado a la mujer en su época. Todas estas novelas de los años 20 y 30 del siglo XX tienen ese extraño aire de modernidad y utopía que pronto se vendría abajo con la guerra civil y la Segunda Guerra Mundial. José Díaz Fernández supo ver en su ensayo El nuevo romanticismo el cambio estético que llevaría de la deshumanización del arte de Ortega y Gasset a una atención por los aspectos humanos y éticos, un cambio que quedaría reflejado a la perfección en las poéticas de la Generación del 27. 

El segundo reseñado es el gran Valle-Inclán, que coloca en este mes dos obras con referente femenino de distinto alcance: La Corte de los Milagros y Sonata de otoño.
La primera de ellas es una novela panorámica de nuestro periodo isabelino en la que se muestra el esplendor de la prosa ácida de Valle a expensas de la caricatura de Isabel II y su degradado entorno cortesano. Es un retrato despiadado, tanto de la reina como de su consorte. No necesito dar detalles de la otra obra, que forma parte de las Sonatas, joya del modernismo decadentista en el que las mujeres representan un trofeo para el Marqués de Bradomín, ese galán feo, católico y sentimental. En el caso mencionado se entrega patéticamente a una mujer de edad avanzada. El grotesco final lo dejo en el aire para no desvelar la esperpéntica puesta en escena del autor.


Por último, no quiero dejar en el tintero una novela particular, a mitad de camino entre el teatro y la novela, entre la literatura y el ensayo. Se trata de La velada en Benicarló de Manuel Azaña, considerada el testamento político del que fuera presidente de la República Española. Esta obra fue escrita en Barcelona entre abril y mayo de 1937 en plena guerra civil. Reproduce un (im)posible diálogo entre varios personajes que coinciden en un albergue de Benicarló y que representan las corrientes de opinión política y social de la época. Es una obra fundamental para entender nuestra historia reciente y resulta además muy esclarecedora acerca de la dificultad de entendimiento dialogado entre las facciones en lucha. Si alguien se anima a leerla, puede acceder a ella en formato digital. Dado que esta sesquidécada pretende hacerse eco en parte de la situación femenina, recojo una cita al respecto:

Muchos varones españoles no han llegado a darse cuenta cabal de su posición como cabezas de familia. Abundan los mantenedores de una autoridad marital moruna. Se creen los amos. En un pie de igualdad se tendrían por deshonrados. "¡Cómo se entiende que la mujer...!" "¡Qué iba yo a tolerar...!" Con relegarla aparentemente a los cuidados del hogar y envanecerse de ella cuando es bonita, mantienen una tradición que llaman española.
Lamentablemente, parece ser que las 'tradiciones españolas' pasan casi siempre por la tortura de unos a manos de otros. Nos queda un largo camino por delante para que todo esto cambie.

Crédito de la imagen: Fotograma de Metrópolis, de Fritz Lang

17 noviembre 2011

De vuelta a Internet... en el aula

Algunas historias de la red docente deberían escribirse para que no caigan en el olvido. Sumidos como estamos en el ajetreo de blogs y redes sociales, es normal que no tengamos tiempo para detenernos y mirar hacia atrás, hacia los orígenes de todo lo que hoy nos envuelve. No voy a escribir una nota nostálgica ni reivindicar los tiempos pasados, pero sí quiero aprovechar para recordar la existencia de la red docente Internet en el aula y contar lo que supuso en su día. Es extraño que haya todavía docentes que no conozcan esta red que cuenta casi con 10000 miembros de todo el mundo. Recuerdo perfectamente que a principios de marzo de 2008 recibí una invitación de Felipe Zayas para formar parte de ella. La había creado José Luis Cabello con motivo del Congreso Internet en el Aula que se iba a celebrar de manera virtual y presencial simultáneamente (si no me equivoco, fue la primera vez que se nos ofrecían congresos virtuales, tan habituales hoy día). Me llamó la atención el crecimiento exponencial que vivió esta red en unos días, a pesar de  lo poco que sabíamos entonces de las redes sociales en general y del funcionamiento de Ning en particular.
En apenas dos meses había más de mil personas compartiendo lo que sabían en Internet en el aula. Para mí, uno de los momentos especiales fue el debate sobre el reconocimiento oficial del trabajo con las TIC en el aula, un asunto que había surgido cuando a Lu le negaron, para un mérito al que optaba, la validez de sus magníficos materiales y experiencias. La red se convirtió en un torbellino de ideas y en un foro de debates apasionados del que surgieron amistades que perduran hasta hoy. Quiero pensar que pusimos un granito de arena para que el trabajo en la red dejase de ser tarea de cuatro friquis y pasase a tener un apoyo institucional. De hecho, cuando en 2010 la red Ning avisó de que se convertía en una herramienta de pago, el Instituto de Tecnologías Educativas acabó haciéndose cargo de ella, y comenzó un nuevo ciclo con recursos, actividades, foros y talleres para todos sus miembros.
Por toda esta intrahistoria, cuando me ofrecieron facilitar un Taller Abierto de Aprendizaje en Colaboración sobre Lengua y Literatura, no me pude negar a aportar un poquito de lo que sé a esa red que es de todos, recopilando en un sitio web algunos recursos básicos y comprometiéndome a enseñar lo que yo mismo aprendo día a día. Porque, con independencia de que participes mucho o poco, es importante saber que hay un lugar en el que encontrar colegas y en el que conocer experiencias educativas de todo tipo. Os animo a (re)descubrirlo.

12 noviembre 2011

Aquí cabemos todos


Jaime T. acaba de llegar de Cuba y no se adapta muy bien al modo español de recibir clases. Como su idioma es el castellano, no tiene posibilidad de recibir refuerzos. 
Amelia G. procede de Guinea Ecuatorial y le cuesta hablar castellano, pero tampoco saldrá a refuerzos porque se matriculó a final del curso pasado, con lo que pierde su condición de recién llegada. 
María S. rumana, lleva un año en España y habla muy poquito. Apenas sabe escribir. Cuando se está adaptando, sus padres regresan a Rumanía y se la llevan con ella.
Denis R. viene de Rumanía; se incorpora este curso y por eso está exento de valenciano. Su vocabulario se reduce a unas cincuenta palabras con las que trata de sobrevivir. 
Elena R. está en la misma situación que Denis, aunque a lo largo del curso falta durante semanas porque sus padres deben solucionar problemas en Rumanía y se tiene que quedar con sus primos. 
Miguel O. rumano, es el tercero de nueve hermanos a los que sus padres apenas pueden seguir el rastro. Es habitual que desaparezca a mitad de jornada saltando la valla. No hemos conseguido que escriba nada. 
Antonio H. se ausenta por largos periodos debido a problemas médicos de los que nunca aporta justificación. La última vez que lo vimos fue en noviembre. 
Larissa N. gitana y rumana, sobrelleva con dignidad el desamparo familiar. Tiene una ACIS que no puede seguir porque abandona el centro a mitad de curso, tras haber venido a clase apenas quince días en un trimestre. 
Juan José G. vino de República Dominicana con un informe en el que explicaban que era buen chico. Su nivel es de primer curso de Primaria. 
Elena M. debe ocuparse de su abuela enferma, así que suele faltar dos o tres días a la semana. Allá por enero deja de venir a clase. 
Jénnifer V. procede de un centro de acogida, ya que agredió a un vigilante de seguridad. No hay constancia de que tenga familia. Es violenta en ocasiones, tanto como infeliz. 
Meriem W. argelina, ha repetido primero y repite ahora segundo. Es inteligente, pero su carácter la hace intratable. Consigue reengancharse en un programa de diversificación. 
Andrea D. viene dando tumbos por varios institutos; tiene una hermana autista y no es fácil encontrar centros especializados en los que la atiendan. Es una chica trabajadora, pero no entiende que en clase tenga que sufrir lo mismo que en casa, pues le gustaría ir a un grupo 'normal'. 
Verónica J. es la que controla el patio; es pequeña, pero insulta y pega como una fiera, así que nadie le hace sombra. Viene expulsada de otro centro, así que la fama le resulta útil. 
Arturo F. viene de Venezuela. Es un ligón y sus intereses no están en los libros. Se pelea varias veces con otros chicos de clase para marcar el territorio. 
David B. es gitano y solo viene a clase cuando pasan los servicios sociales, es decir un par de días al mes. Por supuesto, viene con las manos en los bolsillos. 
Omar B. primo del anterior, hace exactamente lo mismo, pero en días distintos; es una cuestión de familia. 
Melody C. es prima de Verónica. Lleva dos años sin escolarizar porque se portaba tan mal que en los colegios no querían ni verla. Es extremadamente lista, tanto como inconstante y ciclotímica. Acumula expedientes por insultos. 
Ernesto A. sufre trastorno de hiperactividad y déficit de atención, con minusvalía reconocida. No recibe atención especializada porque nunca se le tuvo en cuenta ese problema y se le fue aprobando todo. Viene de un colegio concertado que ya no lo aguanta más. 
Liviu D. es rumano y ya ha vivido en tres lugares distintos en el último año. Es especialista en saltar la valla. 
Adriana L. rumana, introvertida, muy trabajadora. Sufre en silencio las bromas de sus compañeros. 
Daniel V. también rumano y muy responsable. Intenta pasar desapercibido, sin preguntar nada aunque no lo entienda bien. 
Gabriela F. tiene problemas de hipoacusia y de logopedia. Es un desastre y casi siempre olvida su audífono, de modo que no puede seguir la clase. Vive con su abuela porque sus padres están en Colombia. 
George T. es tío de Alberto G. también de Guinea Ecuatorial. Nadie se quiere sentar a su lado porque es negro.

Es uno de los grupos de 2º de ESO que he tenido. En estos días, algunos políticos defienden la inversión en centros privados y concertados alegando que así pueden garantizar que "cada padre elija el tipo de centro y educación que quiere para sus hijos". Imagino que los padres de mis chavales también querrían elegir un entorno más 'amigable', pero es lo que hay... esto es la pública, y aquí sí que cabemos todos.

Epílogo:
De todos ellos, al menos cinco consiguieron acabar la ESO. Tres llegaron a Bachillerato, todo un éxito. Otro grupo de 2º de ESO, similar a éste, tuvo menos suerte y ninguno de ellos llegó siquiera a 3º de ESO.

Crédito de la imagen: Colour pencils



01 noviembre 2011

Me han tocado los botones

Nada hacía presagiar que la noche de Halloween se llevaría por delante una de las funcionalidades a las que más uso he dado en los últimos años: Google Reader. El lector de noticias de Google no ha muerto, pero se ha convertido en otra cosa, con un nuevo diseño, con nuevas características, tal vez más social o menos, según los expertos. En todo caso, para quienes utilizábamos el botón de compartir, se ha desvanecido una parcela importante de nuestro PLE.
Llevo usando Reader desde hace cuatro años. Me lo recomendó Ana Ovando y ha sido mi página de inicio en todo este tiempo. He contado alguna vez que su descubrimiento supuso para mí el paso del paleolítico al neolítico en la web 2.0. Sigo alrededor de 300 suscripciones, sobre todo blogs educativos, y me gusta compartir lo que encuentro interesante, algo que podéis ver en un módulo de enlaces en la barra lateral. Sé que otros buenos amigos usaban esa función de Reader (Carlos Cabanillas, Jorge Muruais, Domingo López, Javier Palomares o la propia Ana Ovando, entre otros), por eso esta mañana me he sentido un poco abandonado. Google ha limpiado el diseño de Reader y se ha llevado por delante su función social, que ha desplazado a Google +. Algunos dicen que esto obligará a los usuarios a potenciar el uso del botón +1, lo que permite un alcance mayor, siempre dentro de la red de Google +. Otros están buscando alternativas más o menos sencillas para seguir etiquetando elementos para compartirlos. Y algunos incluso se han alzado en armas contra el nuevo Reader.
De momento, ya que me han tocado los botones, he habilitado una etiqueta de compartidos para seguir con Reader, aunque no descarto pasarme al +1 de Google + para las funciones sociales. El tiempo dirá...

Crédito de la imagen: 'Google Reader shirt from Blogger party'